El agravamiento del conflicto armado con Hamás en Israel ha generado una urgencia humanitaria. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha reconocido la necesidad de rescatar a más de 700 mexicanos que se encuentran en medio de esta crisis. Para abordar este desafío, se ha anunciado un plan que busca acelerar la salida de los connacionales y garantizar su seguridad.
En el día 6 del conflicto, el presidente López Obrador informó sobre la estrategia de establecer un puente aéreo entre Israel y uno o dos países de Europa. Esta medida tiene como objetivo evitar el largo viaje de tres escalas, que originalmente incluía Turquía, Irlanda y Canadá, que los aviones del Ejército mexicano tuvieron que realizar para traer de vuelta a 287 mexicanos.
En una muestra de apoyo y solidaridad, los pilotos y tripulación de las Fuerzas Armadas emprenderán el viaje de regreso a Israel el 13 de octubre. Según los datos del Gobierno, aún faltan por repatriar a 764 mexicanos que se encuentran en situación de riesgo.
«Vamos a establecer un puente aéreo. Los dos aviones permanecerán en Europa, en un país cercano y seguro, a la espera de que podamos reunir a todos nuestros compatriotas y traerlos de vuelta a México», explicó el presidente López Obrador.
El mandatario destacó que Alicia Bárcena, secretaria de Relaciones Exteriores, se encuentra en la tarea de coordinar con los países europeos que podrían recibir a los connacionales mexicanos. Esta operación de rescate se realizará en colaboración con las autoridades israelíes, a quienes López Obrador agradeció por las facilidades brindadas en medio de la crisis.
«Agradecemos a las autoridades de Israel por su cooperación. A pesar de la situación, el aeropuerto de Tel Aviv no se ha cerrado por completo, pero ya se están suspendiendo la mayoría de los vuelos comerciales», añadió el presidente.