Los famosos con más emisiones de CO2

Desde su destacada participación en los Premios Grammy, donde hizo historia al llevarse por cuarta vez el galardón al Álbum del Año, Taylor Swift sigue siendo el centro de atención. En esa misma noche, además de recibir este premio, anunció el lanzamiento de su próximo álbum. Aunque sus logros recientes han generado interés público, la atención hacia ella no ha sido exclusivamente positiva.

Pocos días después de los premios, se supo que el equipo legal de Swift amenazó con emprender acciones legales contra Jack Sweeney, un estudiante universitario que utiliza datos públicos para rastrear los vuelos privados de celebridades, incluyendo a Elon Musk y la propia Swift. Sweeney es propietario de Ground Control, una organización que facilita este seguimiento. La firma legal Venable, que representa a Swift, envió una carta de cese y desistimiento a Sweeney, calificando su actividad como «acosadora» y argumentando que representa una amenaza para la seguridad de la artista.

La portavoz de Swift, Tree Paine, emitió un comunicado relacionando la divulgación de estos datos con un acosador que previamente había sido arrestado por acercarse repetidamente a la residencia de la cantante en Nueva York. Esta situación se suma a un pasado enfrentamiento entre Sweeney y Musk por motivos similares.

Sweeney ha defendido su posición argumentando que los datos que comparte son de dominio público y están disponibles en otros sitios web. Sin embargo, tanto la cuenta de seguimiento de los jets privados de Swift como la de Musk han modificado su descripción para evitar mostrar la ubicación en tiempo real de los aviones.

La amenaza legal contra Sweeney ha generado debate, especialmente considerando el contexto actual en el que las emisiones de CO2 de los multimillonarios están bajo escrutinio. Informes previos han señalado a Swift, junto con otros famosos como Jay-Z, Kim Kardashian y Travis Scott, como generadores significativos de emisiones de CO2 debido al uso frecuente de sus jets privados. Aunque Swift ha respondido a estas acusaciones adquiriendo créditos de compensación de carbono, la discusión sobre la responsabilidad ambiental de las figuras públicas persiste.

El término «desigualdad de carbono» ha surgido para describir la discrepancia entre el impacto ambiental de las personas multimillonarias y el de la población general. Este problema destaca la necesidad de que tanto las celebridades como los multimillonarios asuman su responsabilidad ambiental y busquen reducir su huella de carbono. Aunque algunos artistas, como Coldplay, han tomado medidas para reducir sus emisiones, sigue siendo una pregunta abierta el impacto de los esfuerzos individuales cuando quienes más contaminan no están comprometidos con la reducción de su huella ambiental.

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