En un llamado urgente ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), científicos y expertos internacionales han instado a renovar las narrativas en la lucha por la eliminación de armas nucleares. La segunda mesa de trabajo de la reunión de Estados en el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN) fue encabezada por el embajador mexicano ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente.
El embajador mexicano resaltó la necesidad de adoptar medidas positivas en lugar de sospechar de engaños por parte de las naciones poseedoras de armas nucleares. Hizo énfasis en la importancia de garantizar que las instalaciones nucleares destinadas anteriormente a fines civiles sean debidamente eliminadas y desmanteladas.
Richard Lenaine, asesor sobre armas nucleares en el Comité de la Cruz Roja, subrayó la necesidad de impulsar una narrativa que destaque las catastróficas consecuencias humanitarias del uso de armas nucleares. Planteó la importancia de convencer al mundo sobre la gravedad de este tipo de armamento, buscando una sinergia entre los objetivos del tratado y el respaldo de los estados parte y la sociedad.
Los especialistas coincidieron en la urgencia de erradicar las armas nucleares sin excepciones, destacando que el derecho humano internacional se aplica a estos armamentos de la misma manera que a cualquier otro tipo. Abogaron por dejar claro que las supuestas excepciones basadas en la disuasión o la seguridad no son justificables.
Hidehiko Yuzaki, experto científico, hizo hincapié en la dualidad entre la seguridad nacional y la seguridad humana. Advirtió sobre las consecuencias devastadoras de una guerra nuclear, enfatizando que, aunque algunos países puedan sobrevivir, la población no lo hará.
La reunión, que continuará durante toda la semana, busca culminar el viernes con la firma de una resolución que contemple acuerdos específicos para avanzar en la prohibición y eliminación de las armas nucleares. Este diálogo representa un paso crucial en la búsqueda de un mundo libre de la amenaza nuclear.
