Créditos de carbono: Instrumento de responsabilidad social

Los efectos del cambio climático, son evidentes.

Varios son los esfuerzos institucionales y sociales para mitigar el efecto destructivo del capitalismo la sociedad post-industrial modificó los patrones de comportamiento social y de producción. Sin embargo, hay un bien común que se encuentra en riesgo: el medio ambiente.

Esa sociedad post-industrial construyó individuos con la pretensión de ejercer un dominio absoluto sobre los medios a su alrededor con una actitud indiferente, alejados de las consideraciones éticas y morales en las relaciones sociales y productivas

La tendencia del individualismo metodológico y la explotación de los recursos hoy -cobra facturas-amenaza y pone en riesgo nuestra casa común. L poderosos medios de transformación productiva han generado una profunda brecha de desigualdad y creciente daño a la atmósfera y biosfera.

Señala un principio de la doctrina social que “La naturaleza aparece como instrumento en las manos del hombre” Sin embargo, eso no otorga el derecho a la excesiva explotación de los recursos justificando el daño por lograr el crecimiento y desarrollo económico. Ese planteamiento, es inválido cuando se pone en riesgo el bien común

Los extremos no son sanos

Por otro lado, tampoco es conveniente divinizar la naturaleza como los radicales movimientos ecologistas proponen. Es necesario, instalar un equilibrio en el que preservar el medio ambiente sea una responsabilidad humana “por el bien de todos”.

Ese equilibrio, debe estar en función de eliminar los factores de contaminación, asegurar condiciones de calidad en el aire, agua y suelo, tanto para pequeños grupos como para los grandes asentamientos.

Ahora, no sólo se debe pensar en no contaminar sino descontaminar los entornos sociales y productivos. El reto lo tenemos en este primer cuarto de siglo, particularmente, en la descarbonización de los procesos industriales.

Otro principio de la Doctrina social, señala que “la tutela del medio ambiente constituye un desafío para la entera humanidad” de modo que, todos estamos llamados y obligados moralmente a contribuir a mejorar el medio ambiente,

“Si la responsabilidad de salvaguardar el medio ambiente, patrimonio común del género humano, se extiende no sólo a las exigencias del presente, sino también a las del futuro” la responsabilidad social de tutelar el medio ambiente no sólo debe sostenerse en un criterio exclusivamente moral sino en un correcto ámbito jurídico.

Condenar el capitalismo sería un error. Su propia lógica de mercado plantea alternativas. Aunque sea contradictorio, el capitalismo en sus contradicciones, propone soluciones. Entre ellas, encontramos los mercados de carbono.

Los mercados de carbono son espacios donde las empresas pueden comprar o vender certificados que representan las emisiones de carbono o reducción de gases efecto invernadero GEI.

Como mercado, tiene elementos que lo definen. Por ejemplo, “el precio”. El precio al carbono funciona como una herramienta de política pública que los Estado nacionales, a través, de los gobiernos y empresas (públicas o privadas) pueden utilizar como estrategia climática. El resultado es la existencia de incentivos financieros para mitigar las emisiones de GEI mediante un precio.

En otras palabras, al calcular el valor monetario por tonelada de carbono asociado a un instrumento de regulación deriva en un precio. No obstante, la advertencia a los gobiernos y la recomendación a los poderes legislativos es que cualquier medida debe mantener el espíritu de reducir emisiones, no como una medida para recaudar, es decir, impuestos al carbono.

El desarrollo del Corredor Interoceánico Del Istmo De Tehuantepec implica un gran proceso de desarrollo industrial. El modelo de desarrollo debe ser responsable, cada intervención deberá considerar mitigar o reducir los GEI. La crisis ambiental es, también, una oportunidad de generar procesos industriales que tengan como principio la descarbonización de la industria, generación de energía verde y limpia

En la zona metropolitana de Coatzacoalcos predominan actividades industriales que generan un volumen considerable de emisiones a la atmósfera afectando la calidad del aire. Es necesario, desarrollar y actualizar instrumentos que permitan gobernanza ambiental a través de una planeación integrada para el manejo adecuado del territorio del Istmo De Tehuantepec y en consecuencia, reforzar habilidades de la población para conservar los recursos naturales.

En México varias entidades federativas, baja california, Estado de México, Jalisco, Tamaulipas Querétaro, Guanajuato, Zacatecas, Durango, Colima y Mérida han avanzado de manera significativa sobre regulación al carbono en función de sus actividades económicas y productivas. Veracruz y Oaxaca tienen pendiente urgente por establecer los mecanismos normativos para acompañar debidamente a la industria y cumplir con su responsabilidad.

Asimismo, hay sectores que tienen pendientes, la aviación y el transporte marítimo, por ejemplo, son sectores que frente a las tendencia para mitigar las emisiones deben adaptarse velozmente. Ante tales circunstancias, han surgido alternativas entre ellas la política de hidrógeno verde. En España se hacen pruebas con aviones de hidrógeno, en Islas Canarias se estrena el primer avión con cero emisiones contaminantes (un motor ZA600 de la compañía Zeroavia); en Japón aprueban el primer motor pesado de hidrógeno de barco (Buque polivalente de hidrógeno).

Con base en la Plataforma de Noticias de Hidrógeno Renovable de Chile para el Mundo, el blending es una de las tendencias en el entorno de las tecnologías del H2 verde. Esta técnica se basa en inyectar un porcentaje de hidrógeno en la red actual de gas natural. Se sabe que a través de esta combinación se pueden alcanzar altos niveles de eficiencia para transporte pesado de mercancías de larga distancia tractocamiones que llevan mercancías con distancias importantes generando autonomía de desplazamiento.

Sin embargo, México aún no tiene una estrategia nacional de hidrógeno y aunque se han anunciado proyectos importantes como la construcción de esta planta de hidrógeno verde en Salina Cruz, Oaxaca y el anuncio del fondo de inversión danés Copenhagen Infrastructure Partners para la construcción de una planta de hidrógeno verde para abastecer a los barcos con este combustible limpio y evitar que transiten por los mares del mundo contaminando por la gran cantidad de hidrocarburos que consumen; aún hay retos importantes por superar.

Arlededor de la producción del hidrógeno verde, hay oportunidad para empresas de fabricación de vehículos, turbinas eléctricas, electrolizadores, tanques de almacenamiento, compresores, tuberías.

Las medidas regulatorias deben partir de un correcto manejo para evitar que las empresas rehuían a los impuestos al carbono y aprovechen de manera eficiente los incentivos no dudo que haya empresas comprometidas que asuman su responsabilidad corporativa de los procesos productivos pero es fundamental que exista un marco regulatorio que les permita generar condiciones para el desarrollo y en consecuencia para el bienestar de la población

Es por tanto, fundamental una estrategia, más ahora, con las tendencias de Nearshoring para México, no obstante, corresponde a las autoridades actuar con rapidez y responsabilidad.

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